sábado, 22 de junio de 2019

La razón y la sin razón electoral

 


LA RAZON DE LA SIN RAZON ELECTORAL

Genaro Mosquera C

Todo se ha consumado, las negociaciones entre la oposición y el sector oficial funcionaron para imponer un proceso electoral que comienza con  la selección de los nuevos miembros del Consejo Nacional Electoral. Se inicia de esta manera una nueva etapa en el equivocado sendero de preparar unas elecciones que conducirán a una elección del nuevo parlamento con la presencia de Maduro como usurpador mayor en un proceso que muestra las debilidades de su propia concepción...

Para entender la razón de la sin razón electoral voy a valerme del análisis de varias encuestas recientes considerando las reservas del caso porque conozco las limitaciones de los métodos de muestreo utilizados los cuales por cierto, usan una base de muestreo trabajadas originalmente por el Dr. Felix L Seijas, destacado y magnifico Estadístico fallecido lamentablemente hace pocas semanas quien marco las pautas para realizar las encuestas de hogares mediante métodos por conglomerados con selección probabilística de personas dentro del núcleo familiar los cuales permitían estimar indicadores confiables para los estudios de opinión. No estoy seguro de la correcta aplicación de los métodos por parte de las empresas encuestadoras, y ahora también formadores de opinión los cuales interpretan sus propias visiones y muestran resultados no necesariamente probabilísticos, por tal razón, se deben interpretar sus consideraciones dentro de intervalos aproximados para ilustrar el tema electoral.

Debemos estimar el número de habitantes que quedamos en Venezuela considerando el continuo éxodo de personas que escapan del país. Para ilustrar el asunto, se ha ido del país una población equivalente al total de habitantes de Panamá y Costa Rica, es decir, más de cinco millones de venezolanos donde se destaca un segmento profesional altamente calificado que difícilmente regresara al país. El éxodo continua, pero  los que se quedan en el país se estima que entre el 70 a 80 % de la población está en condiciones marginales de vida, un 18 % en clase media con tendencia a ser pobres rápidamente,  y un 2% de clase media más o menos acomodada o enchufada. Esto quiere decir que de un registro electoral de la poca creíble cifra de 19 millones de votantes 14 se corresponden a potenciales votantes pero que debido al éxodo quedamos en Venezuela no más de 8 millones de personas mayores de 18 años, primera contradicción, el régimen dice que tiene controlado con el carnet de la patria a diez millones de personas.

La crisis social y económica no solo produjo la increíble migración al extranjero, sino que la pésima calidad de vida ha inducido a que pobladores del occidente y del oriente migren al centro del país. Una estimación de este fenómeno social pone de manifiesto que cerca de un millón de personas se han mudado al área metropolitana de Caracas, Maracay y Valencia. En términos prácticos esta gente tiene que reubicarse en los circuitos electorales, menuda tarea.

De las cinco millones de almas en el extranjero al menos tres millones deberán hacer su registro electoral en los centros que se indiquen, tarea casi imposible en el corto tiempo y mucho menos con una estructura consular dicotómica y dispersa que pondrá todos los obstáculos oficiales  para que no voten por cuanto ellos son por lo general de oposición al régimen. Los que desean quedarse en Venezuela se estiman en 7 de cada 10 personas, el resto al cambiar el viento sede marcharan.

Es opinión generalizada de los venezolanos saben por convicción que Maduro es un usurpado, que trampeo las elecciones presidenciales y que el CNE representado por los rectores electorales y los directivos regionales que son centenares contribuyeron al fraude, por consiguiente el Tribunal Supremo de Justicia Legitimo sometió las pruebas a experticia larga y sostenida. Finalmente declararon nulo al sistema electoral, decretaron la nulidad del procesamiento  electrónico y sentenciaron penalmente a todos los directivos del CNE y al mismo Maduro lo sentenciaron como corrupto, dando pie todo ello a que el presidente de la AN asumiera el cargo de presidente interino y provocara el desplazamiento del usurpador, la formación de un gobierno de transición y posterior celebración de elecciones mediante  un sistema renovado y transparente. La gente creyó en ese mensaje, pero hoy día está alarmado o desconfiado porque no se cumplieron las promesas de la oposición y que realmente concilia con negociaciones turbias un proceso electoral donde nada se ha resuelto.

Los sondeos de opinión revelan que en los últimos seis meses la falta de confianza en la dirigencia de oposición hasta el punto que la opinión favorable que tenían para el cambio y de sus dirigentes viene disminuyendo de un 60-70 % a un 40 a 45%. Otro  tanto cree que Maduro si es legítimo polarizando al país de manera irreconciliable.

Al plantearse el acuerdo de renovar a los directivos del CNE y nombrar una comisión de postulaciones las personas han reaccionado negativamente, es decir, que entre el 60 y 65 % afirma que no irá a votar en las elecciones parlamentarias  con Maduro como presidente, y que solo irían a votar un 35% de la población electoral. Tambien revelan que, en condiciones  adecuadas para celebrar elecciones parlamentarias y presidenciales, con un nuevo CNE integrado por verdaderos independientes, con autoridades regionales renovadas, con observación internacional y con Maduro fuera del gobierno  votaría más del 70 al 80% de la población electoral.  

Esa el la opinión media de la población la cual no entiende a los dirigentes políticos e  interpretan que los partidos están totalmente desconectados con las aspiraciones populares y obviamente, generan suspicacias con todo tipo de comentarios adversos dudando de la capacidad de sus dirigentes y de la intención de desplazar al gobierno por esta tortuosa e inútil vía electoral.

Hacer elecciones en estas condiciones son una pérdida de tiempo favoreciendo al régimen que previendo la inevitable abstención cantan el triunfo de un nuevo parlamento con ventaja fraudulenta que les permitirá el ansiado control total del poder en beneficio de sus intereses particulares, la de naciones invasoras, de mantener las facilidades al narcotráfico, proteger al crimen organizado y su policía guerrillera, y como si fuera poco,  los intereses geopolíticos de Rusia, China y del Islán como centros antiimperialistas aupando con el discurso mentiroso tradicional de ser defensores de la democracia y la declaratoria de antiimperialistas contra el gigante del norte, tal y como fue declarado la pasada semana en Cuba acompañadas de las expresiones expansionistas y desestabilizadoras a los gobiernos democráticos decretada por el grupo de Puebla en México e instrumentada por el activismo de foro de Sao Paulo.

Las elecciones sin lograr la salida del usurpador del poder, el chantaje a la oposición obligándola neciamente a apoyar elecciones parlamentarias otra vez fraudulentas determina que continuaremos en la misma decadencia, crisis y desgracia nacional. Las soluciones se nos salieron de las manos, solo los países afectados en su seguridad nacional, su comprensión por razones humanitarias,  y el efecto que tiene  en su propio sistema democrático podrán influir y ayudar a la verdadera oposición que si existe en el país a desplazar por la fuerza a quien no desea desalojar el poder y que intoxica al sistema democrático continental bajo la direccion de Cuba comunista y de los países antidemocráticos  del otro lado del mundo que desean expandir sus imperios  a todo un continente.