sábado, 18 de enero de 2020

DESHOJANDO LA MARGARITA

 


La dramática situación económica se profundiza, ya la población en general no puede sostener la brutal alza de precios que cambia cada hora sin contemplaciones comerciales solo con el argumento primario de que los costos están amarrados al dólar el cual influye en los precios indiscriminadamente. Ya los comerciante y operadores de servicios no se molestan en informar el precio del desaparecido bolívar, sino que hablan en dólares sin medir la ausencia de comprensión de su poder adquisitivo por parte de un ciudadano común, es más, su referencias son caprichosas  en comparación con los precios estables de un artículo en vitrina en Colombia, Panamá o Estados Unidos cuyos precios en general son menores que los que ofrecen en Venezuela.

La situación se hace odiosa por la ausencia de dólares; solo un segmento privilegiado paga en dólares abiertamente ante cajeros de los comercios nacionales. ¿Cuántos son esos privilegiados?, no hay estadísticas al respecto, pero no pasan del dos por ciento de la población, incluyendo a los que reciben remesas, por cierto, bajas en relación a los ingresos que reciben los exilados que envían de alguna de sus ingresos por muchas horas de trabajo.

Las estimaciones de esas divisas de procedencia de la diáspora no parecen tan elevadas como las que se estiman, pero hay transacciones en dólares en efectivo diariamente y su procedencia se presume proviene del lavado de dólares de cuyos mecanismos todo el mundo habla producto de las transacciones en pesos colombianos y dólares. En conclusión, solo un segmento pequeño de la población tiene acceso a divisas para mantener su subsistencia regular frente a la desesperación de la mayoría de la población.

Las consecuencias de la situación económica y sus efectos en la sociedad es tan impactante que ya se aprecia un resquebrajamiento de la burbuja económica, se potencia la crisis a niveles de crispación y su impacto directo en la crisis social e institucional es evidente, sin dejar de mencionar que el modelo de gobierno socialista está causando dichos efectos directos, sino en las economías de otros países como consecuencia del impacto de la migración y el consumo de servicios, empleo y otras variables, pero fundamentalmente, de la masa financiera producto del narcotráfico, venta y reventa de oro y otros productos procedente de la explotación indiscriminada de los recursos naturales por parte de potencias extranjeras bajo la protección del régimen y de las fuerzas paramilitares y militares.

Los elementos mencionados anteriormente conjuntamente con el comportamiento de la dirigencia política y económica está actuando a través de elementos inefectivos y en consecuencia la familia venezolana lo percibe como limitado frente a la necesidad de convertirse en un catalizador para el cambio de modelo político, de tal manera, que se requiere su revisión para inducir de verdad la necesidad de cambio del régimen usurpador, complementado con un importante estimulo y ofensiva popular para lograr la salida a la situación al margen de los tiempos necesarios para que un gobierno de transición recupere el sistema democrático, se realicen las consultas populares necesarias, y luego, vaya a un proceso electoral a su tiempo  a través de un sistema que haya corregido las importantes fallas del sistema fraudulento el cual requiere de una revisión integral estratégica incluyendo las  elecciones parlamentarias indiscriminadas sin estar condicionadas a acuerdos para la sustitución de la usurpación del poder y de obligar el retiro de las fuerzas de intervención cubana e indirecta de rusos, chinos y de países antidemocráticos que trazan las rutas del  régimen que sin vergüenza alguna le ha entregado su poderes de decisión, gerencia, política; y por supuesto, de una revisión institucional y finalmente elecciones presidenciales.

Toda labor de gestión previa, para la recuperación de la confianza de la dirigencia política es necesaria, pero puede resultar inútil. Obviamente es posible; pero es necesario enfrentar la usurpación sin tregua y el presidente interino, soportado por todos los elementos constitucionales y de apoyo internacional debe de dejar de estar deshojando la margarita y asumir el rol de jefe de Estado y consecuencialmente designar sus ministros. Ello incluye poner en su lugar influencias directas provocadas por la interpretación del estatuto que promulgo la Asamblea Nacional que limita sus funciones y por ello, debe complementar su entorno con ministros que aborden cada área político social del país-

Lo más importante, es que se deje rodear de gente honesta y notable que a través de un Consejo de la Transición lo aconseje, establezca puntos de vista consistentes a la situación nacional e internacional del país, incluyendo la odiosa dependencia de países antidemocráticos que han determinado que el país ya no sea tal, y su conducción se nos fue de las manos determinando que la geopolítica internacional funcione entre una diatriba de los poderosos regímenes americano, ruso y chino.

Esperamos que el presidente interino asuma su funciones como comandante en jefe que con la ayuda del Consejo de la Transición integrado por venezolanos representativos, honorables, deseosos de ayudar y permita desarrollar un esquema estratégico de representación no solo interno sino de interlocución adecuada con los países que no apoyan mas allá de los intereses de los partidos políticos y que conduzcan el plan de resácate de la democracia venezolana y se alienen de manera adecuada para enfrentar la avanzada antidemocrática que pretende gobernar a través de mafias del crimen organizado  a Latinoamérica que desean convertirlo en área fértil de sus planes de expansión y dominación.

 

 

 

 

 

viernes, 10 de enero de 2020

SEGUNDA OPORTUNIDAD

 


Es reiterativo expresar que el camino elegido por la oposición organízada de negociar con usurpadores y personas de dudosa moralidad que representan al régimen condujeron a poner de manifiesto la maniobra y el engaño oficial lo que desgraciadamente les permitió al régimen ganar tiempo para desplegar sus tácticas dictatoriales y permitir su aparente consolidación en el poder y al mismo tiempo desarrollar estrategias nacionales e internacionales bajo las directrices de países anti-democráticos  y de los lineamientos del Foro de Sao Paulo.

El régimen casi logra el acuerdo definitivo para celebrar elecciones parlamentarias mediante un proceso electoral controlado y un mecanismo destinado a la  selección de los nuevos miembros del Consejo Nacional Electoral aliado a sus intereses y conducentes a integrar un parlamento bajo su control y de esta manera legitimar sus propósitos sin cumplir las exigencias previas de cesar la usurpación y de acordar elecciones presidenciales

El régimen ha  elegido un camino tortuoso y de violencia para intentar defenestrar a la Asamblea Nacional, apartándose de la formalidad con el apoyo armado de uniformados y sus huestes de colectivos y milicianos. Han intentado apoderarse de la Asamblea Nacional y como es su costumbre, tomando la vía de crear una directiva paralela  integrada por no solo diputados que hipócritamente se decían de oposición ocultando su actuación de cohabitantes y colaboracionistas, sino además por supuestos parlamentarios que incluso ya no pertenecían al cuerpo legislativo.

Ante este hecho, diputados con otra visión, democrática y patriota, procedieron a elegir la Directiva de la Asamblea Nacional Legitima en cabeza del presidente interino. Han afortunadamente desplegado una táctica correcta de reclamo y  enfrentamiento al régimen abandonando el camino critico de la falsa negociación y han entendido de manera general,  que negociar con el hampa organizada es un juego altamente peligroso para ellos y para el país con su directo efecto en la pérdida de confianza de la sufrida población, de su militancia política y de repulsa generalizada que creó una gran desesperanza en el país.

Equivocadamente dentro de esa política, ciertos dirigentes opositores perfectamente identificados también contribuyeron a defenestrar a la Directiva del Tribunal Supremo de Justicia Legitimo mediante un mecanismo similar al anterior, coaccionando y usando métodos cuestionables para con algunos magistrados quienes intentaron cuadrar a algunos de ellos para imponer una directiva afecta a grupos bien conocidos, y prácticamente obligaron a que una minoría de trece magistrados actuar con propósitos ocultos para apoyar las estrategias operacionales acordadas con el régimen mediante la errada política de negociaciones,

Por supuesto, todas las acciones referidas rompen con acuerdos secretos y negociaciones oscuras y se pasa a otro escenario. Se presenta la oportunidad de que la Junta Directiva Legitima de la AN se conecte nuevamente con la población, restablezca la confianza y la comunicación Todos sabemos cómo los  integrantes de la Asamblea, incluyendo a su presidente y dirigentes de partidos políticos  perdieron la vinculación popular y muchos fueron señalados como colaboracionistas de manera indiscriminada. Pues bien, siempre hay una segunda oportunidad.

La situación grave del país en materia institucional se une a la gran crisis socio económica. Comienza a reventarse la burbuja económica, se potencia la crisis monetaria y su incidencia en los ingresos familiares, el efecto en los altos precios de suministros básicos los cuales están tocando el desabastecimiento de manera ansiosa y peligrosa.

Es un dicho conocido y explicado por la experiencia que la economía no tumba gobierno, y que recursos mal habidos producto de los mecanismos delincuenciales permiten crear ilusiones y burbujas de prosperidad. Es evidente el manifiesto lavado de dinero y la difusión de discursos mentirosos, posturas cínicas y bravuconadas de los lideres oficiales, pero en este caso, la crisis económica traza incontrolables efectos; primero, directos de carácter social, económico, e internacionales producto de la desestabilización geopolítica y produce consecuencias tan graves que operan como un catalizador para el cambio de modelo político socialista cuyas variables fundamentales y su efecto en la familia venezolana se convierte en un catalizador para el cambio.

Segunda oportunidad para la nueva directiva de la AN y de su presidente empezando por deslastrase de tanto diputado maula, funcionarios incompetentes o corruptos, y exponer a la luz pública el uso de los recursos de la ayuda humanitaria y del financiamiento de un gobierno de transición.

Deben asumir nueva y sinceramente la necesidad perentoria de coadyuvar al desplazamiento del régimen usurpador  mediante una ofensiva política y popular tal y como debió de haber ocurrido. Es hora de recuperar la denuncia fuerte, aliada a las ventajas del reconocimiento internacional para lograr minar al régimen desde afuera y desde dentro y planear una salida democrática mediante un  sistema electoral adecuado.

Es indispensable administrar de verdad la necesitada ayuda humanitaria, enfrentar la invasión cubana y solicitar públicamente de manera notoria su salida del país, cesar su intervención institucional y militar, acordar con los rusos y chinos su odioso apoyo, renegociar los compromisos económicos, enfrentar la narco guerrilla, las absurdas alianzas con Irán y el Islán, y por supuesto, asumir el reto de gobernar al país que se cae a pedazos.

Una segunda oportunidad de recobrar la confianza del pueblo es asumir el liderazgo logrado, zafarse de la dirigencia partidista y de un Estatuto dictado por la AN que le pone límites al ejercicio de la primera magistratura, lo cual permitiría tomar decisiones sin las trabas parlamentarias que se confunden con funciones del poder ejecutivo,  

Recuperar la confianza en la gente es vincularse con la opinión pública claramente, desechando acuerdos secretos, y los intereses particulares. Enfrenar la usurpación sin esquicies, asumir el rol de jefe de Estado incluyendo la de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, nombrar los Ministros de un gabinete con gente experimentada, y apoyarse en el imprescindible Consejo de la Transición integrado por relevantes personalidades, líderes verdaderos de la sociedad que los hay por centenares para que contribuyan a construir un movimiento cívico con unidad verdadera para que sirvan de contraparte política, representativa y transmisor de nuestras carencias, y aspiraciones democráticas.

No perdamos el camino, apartemos a la falsa dirigencia cuya credibilidad los alejo no solo de su militancia, sino del pueblo en general. Vamos a la  tarea de organizarnos para enfrentar al régimen en todos los terrenos hasta lograr su inevitable desplazamiento y eliminar la dominación ejercida por otros países  antidemocráticos, acompañados de una acción contundente y sostenida que estimule la presión popular para desplazar al régimen con la ayuda internacional. Asumir con valentía y decisión un cambio de conducta en la Fuerza Armada sostén del régimen y actuar sin consideración contra los corruptos. Presidente Interino, usted tiene la palabra y el liderazgo. Tiene una segunda oportunidad.