domingo, 29 de noviembre de 2020

MEMORIA CORTA EFECTOS POLITICOS

 




Actualmente se lleva a cabo un despliegue comunicacional importante sobre la solución  de la crisis venezolana apoyada en una propuesta de  negociación y diálogo orientado a la realización de un proceso electoral el cual conduce poco a poco a las obligantes elecciones parlamentarias dejando a un lado el tema de la usurpación, al gobierno de transición y a las elecciones presidenciales bajo condiciones honorables, pasando por alto, que el sistema electoral ha sido y es fraudulento, y sujeto a la falsa premisa que la mayoría de la población es opositora y votará en masa contra el régimen y como resultado se llevará por delante el poder del régimen actual.

Falsa ilusión, que deja de lado al Tribunal Supremo de Justicia Legitimo (TSJL) cuyas decisiones constitucionales se olvidan como consecuencia de nuestra corta memoria sin pensar en los efectos políticos que tiene  soslayando la conseja popular de que está prohibido olvidar.

Recordemos varias cuestiones fundamentales, el Tribunal Supremo de Justicia fue seleccionado siguiendo los procedimientos constitucionales y la Asamblea Nacional (AN)  nombró a los magistrados titulares y suplentes. Ante tal decisión, el Régimen creo otro Tribunal Supremo de Justicia, y una Asamblea Constituyente. Ambos organismos paralelos en franca oposición a cualquier asunto resultante de las funciones constitucionales de la AN en flagrante violación de la Constitución.

El régimen continúa actuando dentro de su plan de apoderamiento y procede a  inhabilitar a diputados electos o incluso someterlos a juicio y encarcelarlos. Estimuló a través de amenazas  que los magistrados designados se fueran al exilio. En honor a la verdad, estos últimos asumieron sus cargos con rebeldía y honorabilidad y actúan de acuerdo a sus funciones constitucionales en el exterior con muchas limitaciones muy a pesar que quien los designó  los abandonó  a su suerte

En el ejercicio de su trabajo judicial, los magistrados han actuado a derecho y asumieron la denuncia y  petitorios de sometimiento a juicio de los responsables de los  fraudes electorales presentados formalmente con soportes documentales ampliamente revisados y comprobados. El reconocimiento de las pruebas derivadas de su examen condujo al TSJL a descalificar  al Sistema Electoral y por tanto ordenó   votaciones no Electrónicas y exigió la designación bajo formulas claras de un nuevo equipo directivo del CNE.

También ordenó el  procesamiento penal a los directivos del CNE, Incluyendo  a los funcionarios que colaboran con el sistema a ejecutar elecciones fraudulentas. La decisión del TSJL soportada según el expediente SE18-001 sobre la nulidad del sistema electoral  dio dar lugar al recurso contencioso interpuesto por miembros de la sociedad civil considerando razones de hecho y de derecho procedimentalmente expuestas en la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia el cual dictó sentencia  el 13 de junio de 2018 declarando la inconsistencia del Registro Electoral, nulo el uso del sistema automatizado de votación y de escrutinio para la elección de cargos de representación de los poderes públicos y ordena al CNE  que con la participación de las universidades, partidos políticos, grupos de electores y la academia de Ciencias Políticas se inicie el proceso de depuración del RE incluyendo las correcciones sobre la identidad de cada venezolano o extranjero habilitado para votar verificando las actas de nacimiento, digitalizando biométricamente se identidad,  actualizando direcciones domiciliarias, excluyendo a fallecidos e inhabilitados judiciales También ordenó  se diseñar un sistema de votación fundamentalmente manual con preeminencia del voto físico

Para todos estos efectos, exhortó a la Asamblea Nacional la selección y designación de nuevos rectores electorales y a la Fiscalía Nacional dar inicio de acciones de responsabilidad penal a los rectores electorales y a funcionarios regionales incluyendo el debido procesamiento a las empresas informáticas SMARTMATIC y BITZA, de tal manera, que con estas decisiones las elecciones del año 2018 no tienen validez y por tanto es nula  la reelección del presidente y se declara que el mismo ejerce la usurpación del cargo a partir del 10 de enero del año 2019.

Posteriormente el 25 de octubre del 2018, en Sala Plena se acusa al presidente de la Republica de corrupción propia y después de un largo proceso probatorio se le sentencia en razón a la argumentación del juicio penal debidamente comprobada la comisión de hechos punibles los cuales demostraron fehacientemente la culpabilidad y responsabilidad en la perpetración de delitos de corrupción y legitimación de capitales previstos en la Ley Anticorrupción, y la Ley contra la Delincuencia Organizada  y Financiamiento al Terrorismo, por tanto, se le sentenció, fue declarado culpable imponiéndosele  dieciocho años tres mese de cárcel y a una multa cuantiosa y se procedió a ordenar su captura participando debidamente  a la Fiscalía, Interpol, y a la Asamblea Nacional.

Tomando en cuenta los antecedentes judiciales, denuncias públicas y la situación crítica inducida por el régimen, la Asamblea Nacional aplicó las medidas constitucionales del caso y el presidente de la AN asume de manera transitoria el cargo de Presidente Encargado para poner cese a la usurpación, presidir un gobierno transitorio y hacer lo necesario para celebrar ten rápido como sea posible elecciones libres, Para esta decisión la AN norma dicho acto mediante el “Estatuto que rige la Transición a la Democracia y el Restablecimiento de Vigencia de la Constitución”, y declara que el gobierno de Maduro es de facto, usurpa el poder, y ordena crear un Consejo Nacional para la Transición. Así mismo acuerda la realización de elecciones libres y transparentes y hace  una declaratoria de Estado fallido el cual está afectado por organizaciones criminales, Por último, se arroga la función de designar a representantes diplomáticos, asumir la defensa de los activos de la Republica, contribuir a la investigación de la violación de los derechos humanos y de las actividades ilícitas razón por la cual se comprometió a adoptar todas las medidas necesarias para la integridad nacional, preparación de las elecciones y modificaciones legales pertinentes.

Independientemente que la figura adoptada en ese Estatuto transforma la actividad legislativa en ejecutiva limita las funciones del presidente encargado y determina que sus decisiones estén condicionadas a la AN. De tal manera que sus iniciativas se diluyen en el tiempo y lamentablemente no se han aplicado y esta es la razón fundamental para que la credibilidad pública se venga deteriorando sistemáticamente muy a pesar que los gobiernos democráticos de muchos países hayan reconocido al gobierno de transición y lo apoyan abiertamente en los organismos internacionales.

La  incapacidad de ejecutar las decisiones derivadas de estos planteamientos han conducido a ceder ante la presión internacional de resolver la crisis humanitaria no por la vía de fuerza humanitaria obligante, sino a  través de  la tesis de dialogar e ir a negociaciones las cuales han tomado mucho tiempo y han permitido que la crisis socio económica venezolana no se resuelva, se  profundice cada vez mas y provoque la espantosa migración de parte significativa de su población,

De nuevo la Asamblea Nacional volvió a caer en el mismo error del 5 de enero  fecha de la designación de la Directiva del cuerpo al decir que sacaría al régimen en seis meses dándole chance al régimen para que los haya declarado en desacato, perdiendo la oportunidad inmejorable de tomar las decisiones inmediatas que necesitaban los venezolanos para un cambio importante del modelo de gobierno. En lugar de asumir como les correspondía el mismo día 8 de enero, las riendas de la transición, designando y juramentando a un Presidente Encargado tal y como les ordenaba taxativamente el Artículo 233 constitucional y designando un Consejo para la Transición se usó un procedimiento cuestionado condicionando las funciones  de  Presidente de la Transición.

El régimen nunca accederá a elecciones presidenciales; negocia las elecciones parlamentarias y gana el  tiempo conveniente a sus intereses lo cual facilita el agravamiento de la situación país hasta que caigamos en la desesperanza y el fracaso y nos destroce la tiranía. El régimen dictatorial pretende  legitimar sus actuaciones a través de una nueva elección fraudulenta a ser ejecutada mediante  un sistema electoral sobre el  cual ejerce el control total que  le permitiría la supervivencia de su nefasto gobierno, y dar apariencia democrática a su régimen. Difícilmente esa elección parlamentaria  amañada podrá convencer a la comunidad venezolana, y mucho menos, a las organizaciones y gobiernos democráticos  foráneos  que las ha rechazado de manera absoluta y han manifestado por todos los medios oficiales y públicos que no reconocerán dicha simulación electoral y al propio gobierno por antidemocrático.  

Por todas las razones esgrimidas, ante el cambio de dirección de la mayoría de los miembros de la AN ahora infiltrada por diputados del PSUV que habían abandonado sus cargos, forman parte de la ANC y han construido un puente de plata entre ellos, El régimen pide dialogar y presupone su propia y cínica  solución a una crisis reconocida. Con esta decisión, abusando de la corta  memoria del venezolano estimulada por la cohabitación pretende  ir a unas elecciones parlamentarias, olvidarse de las presidenciables propugnando un acuerdo de ir  a un proceso electoral empezando por nombrar a los rectores electorales sin mencionar  a los directivos regionales tan culpables como los nacionales de fraude, e incluso proponer candidatos a la directiva del CNE de dudosa competencia en la materia.

No se puede caer en ese juego perverso sin disponer de los elementos fundamentales democráticos que condicionan cualquier movimiento en esa direccion sin resolver el asunto del Registro Electoral que deja afuera a los  electores que han emigrado a quienes se les pondrá difícil actualizar el registro y el régimen pondrá todos los obstáculos espaciales y estratégicos para no dejarlos votar en una eventual elección, Así mismo, resolver el tema relativo a los nuevos votantes sin inscripción, a dos millones y medio de cédulas falsas y el imprescindible ajuste de los circuitos electorales que han sido manipulados igual que el sistema informático que obliga a elecciones manuales.

En resumen, sin la solución a los problemas señalados, fuente de elecciones fraudulentas y a pesar de lo acordado, no habrá elecciones creíbles si no cesa la usurpación, se nombre un Consejo para la Transición y se diseñe un aparato electoral que ponga remedio a tanto desbarajuste procedimental, interesado y fraudulento, No podemos alimentar la esperanza de ganar unas elecciones que se fundamentan en una mayoría opositora, cuyos partidos políticos han perdido  el respaldo de la sociedad, y  que es una falacia cuando el régimen ha fragmentado e intervenido los circuitos electorales y ha sacado en la práctica a millones de electores que se han ido. Elecciones con ese perfil tendrá consecuencias políticas nacionales e internacionales muy graves.

No perdamos el camino, hay que instrumentar acuerdos, sugerencias y estrategias ampliamente debatidas y realistas, no consideremos a que los que se apartaron por razones de conveniencia, colaboración o intereses de aplicar decisiones correctas y como ellos no cumplieron con las acciones adecuadas a las circunstancias verbigracia, las decisiones del TSJL apartemos a esa falsa dirigencia cuya credibilidad los alejo no solo de su militancia, sino del pueblo en general, por tanto,  pongamos en manos de un nuevo Movimiento Cívico la tarea de organizarnos enfrentar al régimen para su inevitable desplazamiento y eliminar sus intenciones de dominación en complicidad asociada a otros países  antidemocráticos, al narco terrorismo y a los esquemas de la izquierda radical latinoamericana dirigida y financiada por Rusia, China, los oportunistas y aprovechadores cubanos y  los países islámicos donde todos desean a como de lugar expandir sus políticas socialistas, de beneficios económicos y poner su planta insolente como cabeceras de playa en los países democráticos del Continente desestabilizando intencionalmente a sus gobiernos para desplazarlos en función de sus intereses .

 

sábado, 21 de noviembre de 2020

RUPTURA DEMOCRATICA

 


Ruptura democrática

Por

 Genaro Mosquera

November 21, 2020

También se han examinado las irregularidades de los procesos informáticos, los cuales han sido administrados por diversas empresas de dudosos antecedentes en la materia.

Se han señalado como responsables de tal situación a activistas comprometidos con agendas derivadas de planes de organizaciones políticas antidemocráticas, tales como las directrices contenidas en los programas del Grupo de Puebla y de otras similares. Las actividades planeadas son estimuladas en cada localidad por grupos extremistas focalizados en protestas violentas, sustentadas en temas controversiales como, por ejemplo, raza, sexo, discriminación social, clima, etc., cuyos objetivos son en sí mismos preparados fundamentalmente para desestabilizar las democracias del continente, lograr posiciones de poder e iniciar la siembra del socialismo en aquellos países que aún se resisten a sus pretensiones.

Tales compromisos han sido asociados a líderes del Partido Demócrata en beneficio de su candidato presidencial y sus maniobras en manos comprometidas de ese partido han inducido violencia callejera  y proliferación de información confusa polarizando a la población, incluso más allá de sus fronteras, estimulada por las grandes cadenas audiovisuales bajo control de grupos transnacionales desacreditando y minando la confianza de los electores, lo cual produce  un golpe severo a los principios democráticos basados en un sistema libre y en los procesos para elegir a sus líderes.

Esas acciones han impactado al proceso electoral presidencial de Estados Unidos, y han sido instrumentadas mediante procesos irregulares y en la intervención de los sistemas informáticos al viejo estilo de los usados sistemáticamente en Venezuela, que ha sido acusada y sentenciada de fraude continuo en sus elecciones y han colocado al régimen en la frontera de Estado fallido y sus dirigentes acusados de corrupción y usurpación del gobierno. Sin embargo, aún persisten en dicha práctica, y que ahora, pretenden consolidarse con elecciones fraudulentas legislativas con el fin de lograr el control total socialista y aparentar cierta legitimidad democrática.

Se ha cuestionado desde hace bastante tiempo el voto electrónico en los procesos electorales; y ha adquirido dimensiones importantes en Estados Unidos en relación con las elecciones presidenciales y de autoridades legislativas. Estudios bien documentados han revelado la intervención de la tristemente célebre Smartmatic que ha cedido sus soportes tecnológicos a una empresa denominada Dominium Systems, DVS, que utiliza los códigos electorales en más de la mitad de los estados de ese país.

Es conveniente tener presente que el sistema electoral de Estados Unidos separa las funciones federales de cada estado incluyendo la electoral, en la que cada uno es responsable de establecer sus propios estándares y procedimientos, los cuales delegan a los gobiernos de los condados y a las ciudades. Como se aprecia, el uso de la tecnología electoral es generalizado y ha sido decisión de muchos estados de la Unión reglamentada por la Comisión Nacional de Asistencia, que solo  define los estándares de los proveedores de dichos sistemas dejando en manos locales la contratación de al menos media docena de grandes empresas con accionistas comunes vinculados a fundaciones globalistas y que entre sus objetivos están implantar un “nuevo orden mundial”, y estimular a los movimientos socialistas de varios países antidemocráticos.

La estrategia política basada en sistemas electorales controlados ha abierto la brecha para penetrar al sistema democrático americano, con la meta común de desestabilizar a la sociedad, con la pretensión de instalar el sistema socialista en los países democráticos y en la joya de la corona que es Estados Unidos.

La mayoría de las empresas asociadas al procesamiento de la data procedente de las elecciones son propiedad de grupos globalistas que han penetrado interesadamente las políticas del Partido Demócrata. A través de la manipulación de los resultados electorales tienen el fin de colocar a sus líderes en el movimiento político democrático e inducir un efecto implosivo para lograr controlar la política, acceder al poder, preservar sus intereses multibillonarios en los centros financieros, y de los servicios, incluyendo a algunos países.

Es un hecho que los usos electrónicos de los sistemas electorales ocupan un lugar importante, y es notable que tres empresas dominan el mercado de esos sistemas electorales que atienden a más del 90% de los votantes en Estados Unidos. Algunas de esas empresas  se ubican en Canadá, España y Alemania, escapándose de esa manera de la supervisión oficial en detrimento de la seguridad de los sistemas, llegando al extremo de que el procesamiento de los resultados electorales se realiza en otros países, lo cual refleja la intervención directa de otras naciones en las elecciones, razón por la cual ya comienza una nueva etapa de investigación de establecer las responsabilidades de ellas y sus propietarios, cuyos efectos en los resultados electorales pueden demostrar fraude e incluso traición y violación de la seguridad nacional.

Estas peligrosas actividades para la preservación de la democracia están siendo aclaradas  e investigadas en jurisdicción extranjera, su conexión con el conglomerado globalista y sus acciones financieras, entre ellas empresas ubicadas en Nebraska cuyas operaciones de cambio de accionistas y de capital se facilitan en Delaware y están destinadas a cubrir las espaldas de los verdaderos dueños que operan por “casualidad “en los estados donde se han denunciado irregularidades mayores y han puesto en jaque la elección de Estados Unidos, quebrando el mito de la verdad americana como principio, creando pérdida de confianza en el sistema electoral, poniendo en peligro la democracia como sistema político.

Es ya de vieja data que las empresas de servicios electorales anteriormente señaladas han llevada el escrutinio y publicación de elecciones en varios estados desde 2004 y han adquirido la experiencia en el escaneo y procesos del sistema de votación por correo, que ha sido cuestionado hoy día por su hipersensibilidad de operar de manera absolutamente irregular, tal y como está siendo denunciado actualmente.

Se confirma la intervención financiera y operativa en el resultado electoral de grandes empresas y del movimiento llamado progresista, cuyo objetivo ha sido lograr el poder, imponer el socialismo y los intereses de países antidemocráticos, incluyendo la significativa participación china, favoreciendo la expansión rusa, la penetración en el continente de los movimientos  islámicos y la consolidación de gobiernos socialistas en Iberoamérica cuya agenda pública sin rubor obedece a las agrupaciones globalistas.

Con la ayuda de las cadenas noticiosas internacionales en manos de ese perturbador movimiento, polarizan la opinión pública. Sin embargo, independientemente del resultado de las elecciones en Estados Unidos, los partidos involucrados son por principio democráticos y sus mecanismos internos detendrán de alguna manera a aquellos movimientos que perturben sus políticas, contribuyendo con los contrapesos institucionales de ese país para evitar el avance del socialismo, especialmente considerando que un movimiento de esa naturaleza tendrá el rechazo mayoritario de la población, y frenarán la penetración de los intereses de países antidemocráticos que pongan en jaque la democracia. Sus movimientos y reacción van a ser importantes y su política exterior, apoyada en el balance del poder, no podrá ser vencida por fuerzas extrañas en beneficio de los intereses de regímenes antidemocráticos que al final serán vencidos, como es el caso de Venezuela y sus ultrosos aliados del Caribe.

 Independientemente de la decisión que se tome como consecuencia del resultado electoral, el sistema ha sido afectado y se le ha inyectado una dosis de incredibilidad y se ha perdido la confianza del elector, lo cual resulta altamente pernicioso para la democracia del país del norte. Sus efectos ya se hicieron sentir al sur del río Grande, algunos países, ya bajo control del movimiento globalista, defensor de un nuevo orden, cuyas acciones deberán ser revisadas por todas las instancias académicas, políticas y judiciales para establecer una política de contención y aplicar las sanciones a que dé lugar.

Será necesario revisar el sistema electoral de manera integral para poder dar transparencia al instrumento más importante de la democracia, es decir, no habrá posibilidad de llevar a cabo elecciones de ningún tipo si no se resuelve la calidad del sistema en lo que corresponde al padrón electoral en total correspondencia con la población y sus movimientos demográficos, afinar las participación clara de votantes mediante un registro objetivo, claro y transparente e identificar de manera inequívoca a cada votante, establecer el voto manual y que los procesos de totalización e informática se realicen en instituciones formales de alta confianza acompañados de un sistema de control independiente y efectivo.

El sistema informático no puede estar en manos de empresas contaminadas susceptibles de introducir elementos fraudulentos en sus procedimientos para favorecer interesados y proteger sus grandes negocios multilaterales, incluyendo las grandes cadenas audiovisuales que han sido compradas y puestas al servicio de intereses obscuros a una causa que pretende gobernar al mundo, apoyar a gobiernos títeres y manipular todo el sistema democrático en beneficio de intereses globales, particulares, y locales que inevitablemente están conectados con el crimen organizado internacional.

 

 

 

 

sábado, 14 de noviembre de 2020

LA ETERNA CONTROVERSIA

 


La eterna controversia

Por

 Genaro Mosquera

November 14, 20

Es sorprendente la conducta del venezolano de la diáspora en Norteamérica, que en general ha transferido su sentir ideológico a esa parte del continente, tomando parte en la diatriba entre los partidos Republicano y Demócrata, asociando a esas divisas una posición conservadora y a la otra, condición aparentemente socialista. La postura se ha hecho viral y ha dado lugar a la eterna controversia entre ambos extremos, pero lo hacen por lo general sin comprender adecuadamente la cultura norteamericana y menos aún su sistema electoral; simplemente, muchos de ellos, asumen opinión cuyas expresiones públicas los hace sensibles negativamente a la comunidad local, incluso a los representantes de las instituciones democráticas de ese país.

El elemento a discernir está centrado en lo que los socialistas denominados cínicamente progresistas vienen practicando con visión interesada, enfrentando a los que no lo son porque suponen defender al “odioso capitalismo”. Otros, moderados aparentemente, manejan el argumento de la necesidad de un modelo político intermedio con el fin de evadir la controversia manejando la vieja estrategia de ir a un sistema de gobierno socialista de centro.

A estos argumentos los elementos opuestos ripostan que la política socialista es complaciente con las dictaduras de la región, sopesando que la misma favorece el apoderamiento del comunismo en su fase más activa de expansión en las Américas, afectando a los países democráticos, imponiendo los intereses globalistas, destacando el tema de los intereses económicos y financieros del cual se nutren y los vinculan con el terrorismo, al crimen organizado y a los gobiernos antidemocráticos de la región los cuales van de la mano a la galopante corrupción, y a las estrategias de aprovechamiento económico.

La discusión lleva al problema central de una posición polarizada inducida por los “progress”, la cual constituye uno de los puntos más destacados de la agenda socialista, orientada imponer la tesis más nueva de un socialismo disfrazado de progresismo. De lo que se trata, entre otras cosas, es de exacerbar las acciones desestabilizadoras aparentemente democráticas de grupos de activistas cuyas acciones son financiadas y estimuladas en las redes sociales, confundiendo a los cotidianos lectores, quienes por lo general ahora dudan de los argumentos de ambos lados tras discusiones aireadas e inútiles creando el clima adecuado para contribuir del lado socialista a imponer sus objetivos.

En general, las corrientes de opinión administradas por las grandes cadenas audiovisuales y fundaciones, comprometidas con el movimiento globalista, divulgan por adelantado la potencial ganancia de los demócratas en las elecciones norteamericanas afirmando con vehemencia, e interesadamente, que el gobierno republicano es representativo del capitalismo más extremo, desprestigiando públicamente al presidente de la nación, y que es un peligro su continuidad en el poder, al efecto, se está dando una gran batalla con relación a los resultados de dichas elecciones, alimentadas por las fallas detectadas en los procedimientos electorales, los cuales han puesto en peligro al propio sistema democrático ante la potencial invasión de intereses extraños en el pastel electoral.

El tema se profundiza cuando se rompe el mito de la verdad, fundamento de la sociedad norteamericana al estimular falsas verdades pregonadas por los grandes medios de comunicación, que ahora se arrogan el poder de proclamar los resultados electorales frente a un conjunto de anomalías que han sido ya denunciadas masivamente, y la comprobación de irregularidades tales como las deficiencias de los sistemas informáticos puestas de manifiesto a través la operación de empresas cuestionadas mundialmente y modelos científicos de comprobación, como por ejemplo la aplicación de la Ley de Benford https://gnews.org/534248/, que anuncian las irregularidades en la votación en varios estados de la unión.

Hubo frecuentes denuncias de cómo se cambiaron la fecha en los sobres de votación por correo, la votación de cientos de miles de personas fallecidas, la pérdida y secuestro de boletas en el correo, dudas en el manejo de la data, y la participación de empresas de apoyo logístico propiedad de relevantes dirigentes de los denominados grupos globalistas. Incluso, las auditorías ponen de manifiesto problemas en el conteo definitivo que hacen que la controversia se profundice rompiendo la credibilidad del sistema electoral, en la cual tanto confía la sociedad norteamericana, de tal manera, que se pone en duda la confiabilidad del sistema cuyos resultados los hace parecer mucho al comportamiento de viejos vicios electorales desarrollados en Venezuela, cuyo modelo por cierto es objeto de exportación.

La consecuencia de jugar adelantado tomando partido en los resultados electorales norteamericanos por parte de las cadenas noticiosas y de algunos líderes regionales, sin importar que el proceso electoral está contaminado, cuyos resultados definitivos estarán sujetos a las leyes y a los poderes del Estado. Sus actuaciones ponen de manifiesto la ambivalencia y doble moral de los dirigentes del socialismo e incluso de políticos de otros países, en especial de la oposición venezolana, quienes también toman partido de manera oportunista y precipitada.

La estabilidad de las políticas nacionales en los países democráticos es atacada como primer objetivo socialista, apoyada en la tesis de Puebla, diseñada por connotados intelectuales de la izquierda, quienes han sembrado con sus acólitos al sistema institucional de los gobiernos como un caballo de Troya para ir ablandando al sistema con fines de apoderamiento y explotación.

La lucha en verdad tiene efectos sobre la democracia y en su mantenimiento, cualquier lucha por mantener la trasparencia es imprescindible ante el daño de no creer en el sistema electoral. Como siempre, son los socialistas o comunistas los que tienen un plan y lo ejecutan fielmente y sin pausa. Sin duda que hay un movimiento a nivel global para cambiar el actual orden mundial, mientras las ideologías de derecha y centrista van perdiendo espacios y no se unen ante este peligroso fenómeno. Los hechos políticos nos deben hacer reflexionar y poner en guardia en defensa de la democracia y diseñar las acciones necesarias sobre la supuesta llegada de los socialistas al poder en Estados Unidos y la retoma del poder en varios países latinoamericanos.

 

 

sábado, 7 de noviembre de 2020

AGENDA SOCIALISTA

 

Agenda socialista

Por

 Genaro Mosquera

 -November 7, 2020

Las organizaciones políticas socialistas vienen actuando a través de amplias redes globales en franca cooperación con gobiernos totalitarios cuyo fin último es el de destruir al capitalismo e imponer el modelo socialista. Para intentar conseguir ese objetivo cambiaron la táctica armada por la electoral, con la particularidad de manipular los procesos electorales para la conquista del poder, dar apariencia democrática a sus resultados y en aquellos, casos donde tuvieron éxito, preservarlas en el tiempo y usarlas entre variados objetivos como cabeceras de playa para la intervención en el resto de los países iberoamericanos.

Sus herramientas se sustentan en deshacer la cultura de los pueblos, tergiversarla, rehacerla, y desinformar, llevándose por delante las libertades públicas, apoyados en la propaganda, agitación y lucha asimétrica en una actividad desestabilizadora en los países democráticos del continente americano.

Las acciones derivadas están orientadas por una agenda llamada cínicamente progresista, las cuales penetran internamente en los países a través de la activación política de fichas infiltradas en la sociedad y en la organización de la violencia apoyada en grupos comprometidos y una plataforma basada en elementos sensibles, tales como: los derechos de género, conflictos raciales, aborto, homosexualidad y descontento laboral.

La referida agenda viene acompañada de un plan desestabilizador, el diseño y control de los sistemas electorales los cuales han sido penetrados hábilmente, no solo con activistas sembrados en las instituciones, sino con la manipulación de los sistemas electrónicos y el financiamiento de grandes corporaciones de la comunicación y fundaciones que tienen entre otros propósitos el aprovechamiento y control del poder nacional e internacional. Para lograr dichos propósitos diseñan estrategias electorales fraudulentas, complementadas con la desinformación, preferentemente, a través de las redes sociales, induciendo a la opinión pública con información manipulada y tergiversaciones de la verdad como la vía más expedita para lograr la dominación e imposición de un modelo de gobierno socialista.

Como producto de una operación debidamente programada, las organizaciones nacionales y  personas se polarizan, se potencia la aspiración y  el espíritu de creer que por la vía del voto elegirán a sus gobernantes a través de un proceso aparentemente transparente para preservar la democracia, sin apreciar adecuadamente, que están contribuyendo a legitimar objetivos  obscuros que terminan en gobiernos dictatoriales, tal es el caso de Venezuela, Nicaragua, Argentina, Bolivia y ahora en Chile, usando un mecanismo de consulta para lograr el cambio constitucional apoyado en el trajinado y efectivo proceso constituyente, o la adecuación de la Constitución elaborada a su medida. De esta forma, podrán gobernar con un modelo socialista en dinámica evolución hacia el comunismo, favoreciendo los intereses rusos, chinos y, colateralmente, de Irán, islamismo y castrismo, como receptores de las prebendas económicas y financieras.

 Es evidente, que los medios de comunicación masivos, partidos políticos, instituciones culturales y educativas, especialmente las universidades han sido sujeto de penetración y direccionamiento por un liderazgo de izquierda que ha hecho que esos centros sean en la práctica ministerios operativos y financieros de sus acciones políticas. Desde esas tribunas, vienen sistemáticamente pregonando el supuesto fracaso del modelo económico capitalista que rige en el mundo culpándolo de todo daño social, desigualdad y pobreza, que por cierto, viene de siglos atrás y que han generado ideas diametralmente opuestas a la economía de mercado y a las libertades individuales, potenciando con una narrativa engañosa que va pausadamente calando en los pueblos mediante el adoctrinamiento y la propaganda, ahora llamado hipócrita y engañosamente, movimiento progresista.

La influencia de la agenda en cuestión está dirigida por los regímenes ruso y chino, orientados a extender su influencia y deseos expansionistas con planes perfectamente articulados y climatizados con las organizaciones iberoamericanas, como es el caso del Grupo de Puebla que agrupa a los dirigentes de la izquierda radical formados intelectualmente en las universidades, los cuales con sus acciones deforman los valores democráticos y contribuyen a extender la influencia comunista en todo el mundo, especialmente en Estados Unidos, el cual figura como un objetivo mayor.

En este caso particular, se han apoyado en el Partido Demócrata, el cual busca oxígeno para recuperar el Poder Ejecutivo y sin escrúpulo alguno apoyan claramente a cientos de grupos vinculados al Partido Comunista chino y el cubano, quienes conducen una campaña a gran escala para generar una profunda división en todo el país del norte y al resto de la comunidad latinoamericana.

Investigaciones sobre este particular realizadas por organizaciones confiables revelan cómo han estado trabajando a nivel federal, estatal y local para fomentar las condiciones y conexiones necesarias para lograr sus propósitos, ello incluye a empresas, universidades, y grupos de expertos, incluyendo a organizaciones de la diáspora y de los grandes medios de comunicación. Los resultados de dichas pesquisas resaltan la participación de actores rusos y chinos los cuales armaron miles de cuentas en las redes sociales para lograr la influencia más cercana con la población promoviendo mensajes a favor de movimientos como Black Lives Matter y Blue Lives Matter, grupos de la defensa del género y antirraciales para profundizar la división y el resentimiento entre los norteamericanos. Hoy entre sus estrategias procuran impulsar el favoritismo hacia el movimiento demócrata y abortar la firme posición del gobierno en sus reiteradas denuncias contra del régimen comunista y su intervención en la soberanía americana a través de personajes importantes ya identificados en turbios negocios.

Este es un año atípico, complejo, con efectos directos en materia sanitaria derivada de los efectos del virus chino y sus consecuencias económicas y políticas que han potenciado los conflictos los cuales son aprovechados por los movimientos socialistas, generando la confrontación entre los que defienden la democracia y los que pretenden apropiarse de ella de manera poco ortodoxa. La más relevante de esta acciones es contra la libertad de expresión, pero lo que más llama la atención, es la posición vergonzosa e interesada adoptada por la gran prensa, y los grandes medios audiovisuales norteamericanos que se han puesto del lado autoritario defendiendo al modelo socialista, deformando las medidas  tomadas contra el terrorismo y el narcotráfico, ampliado por la tesis que el bloqueo económico es el responsable de la gran crisis venezolana, y que la ruina anunciada en Argentina es producto del ignominioso neoliberalismo, tomando fuerza su agenda política disfrazada como progresista para hacerlas más tolerable a la opinión pública echando la culpa de todo mal al capitalismo, ampliando el discurso resentido contra las iniciativas y emprendimientos individuales.

Por ahora, el tema se reduce a una oleada de iniciativas desestabilizadores y se ha aprovechado del clima electoral de varios países con los medios mencionados en una clara acción interventora. Solamente hay que ver el caso de Venezuela que a través de elecciones ilegales parlamentarias que se han organizado no solo para defenestrar el gobierno interino, sino para legitimar sus acciones fraudulentas a gran escala, lavar la cara a las enormes transacciones comerciales y legitimar sus corrompidos contratos.

También en Bolivia a través de elecciones fraudulentas han propiciado el regreso del Movimiento al Socialismo. Así mismo, aseguran la permanencia del régimen nicaragüense en próximas elecciones; en Chile intentan cambiar la estructura constitucional para favorecer el regreso del socialismo; promueven a gran escala el movimiento guerrillero en Colombia con el fin de derrotar a la democracia; preservan y defienden las acciones de los gobiernos de México y Argentina, desprestigian al gobierno brasileño, y finalmente, intentan  derrumbar la estructura política norteamericana a través de mecanismos electorales fraudulentos aprovechando que el pueblo tiene absoluta y ciega creencia en la verdad y sus sistemas.

Lo que está ocurriendo en el proceso electoral norteamericano nos recuerda las patéticas maniobras electorales en Venezuela, Ecuador y Bolivia, caracterizado por la obstrucción de gobernadores provinciales para impedir el acceso al voto, el registro de más votantes que votantes registrados, como acaba de ponerse de manifiesto en las elecciones norteamericanas en 352 condados distribuidos en 29 estados donde hay una sobre estimación de casi 2 millones de votos fantasmas, que los registros electorales no se corresponden con las estadísticas del buró del Censo, donde existen centros de votación cuya población votante excede al 100% de los votantes, donde en 6 estados de la Unión se continúa un escrutinio fuera de los lapsos, y como si fuera poco, violando la buena fe del correo donde aparecen millones de boletas emitidas por votantes fantasmas, y sostenidas dudas acerca del proceso informático. Es pocas palabras, un proceso fraudulento que está poniendo en peligro la democracia norteamericana, facilitando el acceso a la Casa Blanca a líderes extremistas que atentarán contra el sistema social, económico y político del gigante del norte.

La denuncia, experiencia vivida en los procesos electorales y las evidencias de un proceso electoral manipulando en favor de los intereses oscuros del llamado globalismo está siendo procesado. El aparato legal fundamentado en la separación de poderes debe actuar en protección a la verdad y de la libertad para evitar esta gran conspiración de una dirigencia socialista, corrompida e integrada al crimen organizado. Por supuesto, no tendrán éxito, sus actores terminarán de una manera no precisamente feliz, se les ha caído la careta, se han descubierto sus tramposerías y vínculos con el crimen organizado.