sábado, 26 de octubre de 2019

NEGOCIACIONES Y EJERCITOS DE OCUPACION

 


Genaro Mosquera C.

Nuevamente ya no en la sombra, sino abiertamente y sin rubor se negocia con el régimen La consecuencia la tal operación ha tenido una base supuestamente de defenestrar a Maduro como usurpador de un gobierno que fue declarado como tal por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) legitimo quien preparó los protocolos legales necesarios para lograr el apoyo internacional a la salida de la crisis y, muy especialmente su declaratoria de invalidez del sistema electoral lo cual es el principal argumento para dejar en claro la usurpación del poder. A pesar de lo expuesto, no se han logrado satisfacer las exigencias nacionales e internacionales, incluso haciendo concesiones políticas, bien sean a políticos de vieja data, disidentes o a partidos políticos; muchas de ellos cuestionados y contaminados con personas de antecedentes dudosos en la gestión que desarrollan y que continúan operando como cooperadores del régimen.

Sobre este particular se observan dos tendencias, los que desean el cambio de régimen exigiendo entre otros a la Asamblea Nacional que autorice una intervención militar de coalición extranjera y aquellos que forjan una negociación para dejar vivo y coleando el sistema socialista dejando fuera al usurpador e ir a unas elecciones presidenciales y  probablemente legislativas que preserven la estructura del régimen dentro de una política de inmunidad, conciliación y convivencia..

Un tema sobre el primer elemento se debe considerar es la “Ayuda Humanitaria” que debió entrar con mediante una “coalición de protección militar de paz “ sustentada en la petición administrativa a la AN, basada en el artículo 187  de la Constitución que habla de “autorizar Misiones Militares que cooperen con las FANB de Venezuela”. Postura que la AN no ha cumplido sino parcialmente y ahora intenta curarse en salud contradictoriamente pero con efecto no prácticos con el instrumento denominado “TIAR”. También han dejado de lado la petición de nombrar autoridades electorales, incluso al Consejo de Gobierno y la recomendación sobre la interpretación de los artículos 333 y 350 para restablecer el orden democrático a través de un levantamiento militar que sería cumplir un deber constitucional, pero este se ha cuestionado y develado por el despreciable mecanismo de la delación y la presión cubana-rusa ordenando para mantener al usurpador a como diese lugar en la cabeza del régimen.

El gobierno norteamericano ha sostenido que “todas las opciones están sobre la mesa” cuya estrategia geopolítica se centra en propósitos disuasivos, de frenos económicos y presión militar para contribuir con el cambio de régimen. Frente a esa estrategia ha avanzado la sustentada por ciertos dirigentes nacionales y  países que juegan a la negociación y a supuestas elecciones democráticas sin cambiar el aparato electoral para indirectamente proteger sus propios intereses volteando la cara para otro lado frente a la masacre humanitaria que cobra cientos de vidas  

Nuevamente se ha desestimulado la acción humanitaria y la intervención militar de paz, como consecuencia, el compromiso internacional con el país se diluye y se eleva de nivel a acuerdos y decisiones negociados entre Rusia y los Estados Unido  dejando de lado un grave problema que representa la invasión tangible  de la  fuerza militar cubana,  y la presencia táctica del ejecito ruso, chino, incluso iraní, quienes llegaron con la excusa de alistar la estructura misilistica y el apoyo a condiciones operacionales bélicas acompañadas con veladas amenazas subjetivas o directas a los Estados Unidos y a Colombia interpretadas como un reto que conduciría a una escala bélica altamente peligrosa donde la irresponsabilidad de un usurpador nos ha convertido en un objetivo militar internacional y dudamos mucho que se entienda objetivamente la gravedad de esta circunstancia.

El resultado de repetidas negociaciones nos está conduciendo aceleradamente a una situación que alarga el tiempo y es cada vez más grave para la población venezolana que es diezmada sistemáticamente como consecuencias del hambre, falta de dinero, inseguridad, medicinas y de servicios de salud, sin dejar de lado la cárcel por la protesta y los asesinatos políticos sin misericordia y rubor. Sin embargo, el manejo hipócrita de una salida de paz y de concesiones a la mafia del crimen organizado donde el régimen es protagonista van a lograr centrar su supervivencia en un acuerdo para llevar a cabo elecciones presidenciales y legislativas en un plazo de varios meses confrontando la oposición oficial a uno o varios candidatos aprobados por el régimen dejando al usurpador ser espectador hasta su total impunidad. Las consecuencias de tal acción serán oprobiosas para unas elecciones trasparentes y para la población en general que no podrá resolver sus problemas de supervivencia a costilla acomodada de la tal oposición, al régimen y a sus acuerdos de quien gobernara este desastre.

Ni se quiere ver ni discutir el tema de fondo que es una población sufrida y deprimida, que continuará el éxodo sin resolver una supervivencia decorosa y democrática. El país continuará en manos de una organización criminal, atentatoria de sus derechos soportada por ejércitos de ocupación que constituyen no solo un atentado a la democracia sino una burla a la seguridad continental y un deprecio a las acciones de países que desean un cambio de situación, no porque les importe demasiado lo que le pasa a los venezolanos sino por los efectos que tienen las finanzas mal habidas, la amenaza militar terrorista y antidemocrática y los de un éxodo que ya no tiene capacidad de absorción.

El rescate de la Democracia, el cese de la usurpación, el logro de la libertad y el ejercicio democrático del poder es el norte para reconstruir a Venezuela a través de una acción planeada basada en la exigencia popular, la acción inteligente de la disidencia, el rescate de la institucionalidad, y el apoyo de la intervención extranjera e imposibilidad de desarticular completamente la fuerza armada nacional quien hace fila protegiendo sus intereses corruptos.  Como no se han logrado estos objetivos, habrá otros escenarios para echar al régimen con toda la fuerza necesaria y ciertamente con todas las opciones posibles ya que no hay fuerza diplomática, restricciones económicas y cerco internacional que pueda reducir a corto plazo a un régimen basado en la fuerza bruta integrada por un ejército de composición multipropósito, como son los treinta mil cubanos, la guerrilla colombiana asentada en el país, los milicianos, los policías metropolitanos, colectivos y mercenarios cuya base de sustentación es dependiente de un colonizador extranjero, de los intereses de países no democráticos y del narco terrorismo internacional. Esto requiere una estrategia militar diferente y es lo que está en juego en los escenarios de los países democráticos y serán decididos en gabinetes de gobiernos internacionales

Todo indica dos extremos del desenlace, o se van del poder los usurpadores, o se mantendrá el terror y la dependencia. Creemos en la necesaria construcción de un Gobierno de Transición con la ayuda de una fuerza multinacional para protegernos de la invasión y ocupación del territorio de fuerzas militares extranjeras asociadas al terrorismo y a las mafias organizadas que se apoderaron silenciosamente del país.

No podemos detenernos por causa de personeros comprometidos y entreguistas, ni quebrar la moral. Se  debe continuar con decisión y sin miedo, denunciar a los manipuladores de la política de última generación e instrumentar la formulación del plan internacional  de reconstrucción  económica y democrática, preparar el terreno para elecciones transparentes necesarias a mediano plazo, conducido por rectores electorales de probada capacidad e independencia, de un registro electoral nuevo que refleje la real estructura demográfica y veracidad de los votantes, de un sistema de control, auditoria y de acompañamiento aséptico internacional preparado en el menor tiempo posible con un basamento institucional plural, libre de prejuicios y de intereses particulares.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario